Las 7 Leyes Universales
Existen siete leyes conocidas como los siete principios herméticos. Proceden de las tradiciones herméticas, vinculadas a Hermes Trimegistro , un ocultista alquímico del antiguo Egipto. Estas Siete leyes aparecen en el Kybalión.
Si bien al conocer e integrar estas 7 leyes, podremos profundizar en el conocimiento de nuestra verdadera naturaleza pudiendo transformar todas las áreas de nuestra vida.
Al comprender estos siete principios obtendremos la clave del éxito.
El todo es mente, el universo es mental
Todo se crea por la fuente universal, y nuestra mente es parte de esa fuente universal. De modo que nosotros creamos nuestra realidad a través de la mente, todo lo que vemos reflejado en nuestra vida es consecuencia de un primer impulso mental, un pensamiento que se ha pensado, dicho, sentido y visto como verdad.
Como es arriba, es abajo; como es abajo, es arriba
Todo se formula a través del plano físico, mental y espiritual. Esta ley te enseña que todo a tu alrededor es un espejo. Lo que percibimos del exterior es en realidad una reverberación de nuestro interior. Así que cambiándonos a nosotros cambiamos el mundo que nos rodea.
Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra
Todo es energía , todo es vibración, todo está en un continuo y constante movimiento. Si nuestras emociones, pensamientos, palabras y acciones son positivas y amorosas, más alto vibraremos y podremos atraer lo similar.
Todo es doble, todo tiene dos polos; todo, su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son medias verdades, todas las paradojas pueden reconciliarse.
Esta ley dice que los opuestos son en realidad la misma cosa en diferentes niveles de vibración. Luz/oscuridad, frío/calor, amor/odio.... Desde un extremo se puede cambiar o transmutar el otro. Subiendo nuestra vibración transmutaremos nuestra sombra en luz.
Todo fluye y refluye; todo tiene sus períodos de avance y retroceso, todo asciende y desciende; todo se mueve como un péndulo; la medida de su movimiento hacia la derecha es la misma que la de su movimiento hacia la izquierda; el ritmo es la compensación.
Todo fluye. El Universo se mueve de manera pendular, igual que el movimiento de un péndulo, de arriba a abajo, de un extremo a otro. Para poder llegar de una polaridad a otra debemos pasar por un proceso, una transición que a veces nos hace pasar entre sombras. Si estamos en el movimiento negativo lo importante es que podamos controlar nuestras emociones y sentirlas como algo pasajero, no apegándonos a ellas, simplemente observándolas para dejarlas marchar, comprendiendo que todo eso forma parte del proceso.
Toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa; todo sucede de acuerdo a la ley; la suerte o azar no es más que el nombre que se le da a la ley no reconocida; hay muchos planos de causalidad, pero nada escapa a la Ley.
Esta es la que conocemos como Karma, que ni es bueno ni malo, simplemente es la justicia dirigida para que exista un equilibrio en todo el Universo. Por tanto todo lo que damos, lo recibimos. La suerte no existe ni la casualidad, todo es fruto de nuestros pensamientos, palabras y acciones junto con las emociones, de esta vida y de las vidas pasadas.
El género existe por doquier; todo tiene su principio masculino y femenino; el género se manifiesta en todos los planos.
Somos duales y todo tiene energía masculina y femenina, todo lo que nos rodea, las plantas , los seres vivos, los electrones, etc.
- Las cualidades de la energía masculina son autoestima, toma de decisiones, fuerza, valor, racionalidad, extraversión...
- Las cualidades de la energía femenina son creatividad, intuición, paciencia, amor, confianza en la vida...
